A
todos, amigos, conocidos, enemigos o indiferentes, pero sobre todo a
los peregrinos, a los hospitaleros y a los hermanos templarios del
Camino el deseo de unas Felices Fiestas, en las que recordemos a los más
desfavorecidos. ¡Qué el 2014 venga cargado de bienes para todos y el
Camino se vea libre de parásitos, turigrinos y chinches!
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