Camino del Sureste

La Diputación de Toledo excluye al Camino de Santiago del Sureste de sus planes de marcación

Por A. Sabrido

Escalona.- Una noticia ha hecho saltar la chispa: la Diputación de Toledo se propone marcar una de las dos rutas jacobeas que atraviesan la provincia, dejando a un lado las razones históricas y pasando por alto la que se considera ruta con más tradición por seguir un antiguo Camino Real de Castilla (la del Sureste). De ese modo, además se margina a una serie de poblaciones toledanas, como Novés, Quismondo o Paredes de Escalona.
En Escalona, donde acaba de constituirse una Asociación jacobea y otros pueblos, coincide el trazado de ambas rutas un buen trecho. En el caso de Escalona se unen a la entrada del puente del Alberche y se separa a la salida, nada más pasar el Arco de las Campanas o de San Miguel.

Pero el hecho es que la rivalidad de los promotores de la ruta valenciana (en contraste con el respeto de la del Sureste) ha conseguido aliados en Toledo y, en vez de sumar esfuerzos, parece que se fomenta más la división.
La llamada de atención la ha hecho Manuel Aliaga, Vicepresidente de la Asociación de Amigos de los Caminos de Santiago del Sureste, que ha remitido ya cartas a los alcaldes de Villamiel de Toledo, Huecas, Novés, Quismondo, Paredes de Escalona, Urda, Los Yébenes, Orgaz, Sonseca y Ajofrín, las localidades afectadas por la decisión de la Diputación.
Una noticia periodística daba cuenta ayer de que la Diputación de Toledo llevará a cabo un ambicioso proyecto para señalizar el Camino de Santiago de Levante a su paso por Toledo, sumándose así a la iniciativa de la Asociación de Amigos de Valencia (la única que propugna esa ruta).

La misma noticia añadía que la vicepresidenta de la Diputación de Toledo, Isidora Fernández Cantarero, ha mantenido una reunión de trabajo con los representantes de los Ayuntamientos contemplados en el proyecto por su ubicación estratégica en el recorrido del Camino de Santiago de Levante para explicarles los pormenores de la propuesta.
Además, se leía en la noticia, el departamento de Turismo de la Diputación gestionará los detalles de esta iniciativa, destinada a señalizar el Camino a Santiago de Compostela desde Valencia a su paso por la provincia de Toledo. Pero no hacía mención a una ruta mucho más antigua, documentada en 1546 en el Repertorio del cartero real Pedro Juan de Villuga.
La iniciativa consiste en colocar paneles informativos en las siete etapas en que se dividen los 175 kilómetros del Camino de Levante que recorren pueblos toledanos, de un total aproximado de 1.200 kilómetros del trazado total.
En total son 21 pueblos pertenecientes a las Comarcas de La Mancha Toledana, Los Montes de Toledo, Torrijos y Toledo los que se verán implicados en la señalización de la ruta. La Diputación asumirá el coste de la colocación de paneles informativos de cada etapa, así como la señalización horizontal y vertical del Camino de Santiago de Levante a su paso por la provincia.
Los municipios incluidos en el recorrido se beneficiarán de la promoción gratuita de sus recursos turísticos, además de facilitar al viajero una información identificativa de los servicios y comercios de cada localidad, tales como alojamientos, restaurantes, oficina de turismo, transporte público, centro de salud, farmacia, y todo aquello que pueda resultar relevante para el caminante.

Pero no se dice nada de la mejora de los pocos albergues existentes y de infraestructuras para peregrinos, como fuentes o andaderos para sacarles en muchos tramos de las peligrosas carreteras. Y lo que es peor, se olvida de una ruta de gran tradición desde la Edad Media: el Camino del Sureste o alicantino.
El Camino de Levante atraviesa las provincias de Valencia, Albacete, Cuenca, Madrid, Ávila y Valladolid. Pero se trata de un trazado ideado por la asociación valenciana (no hay ninguna otra Asociación de Amigos del Camino que fomente esa ruta, mientras que hay cerca de una decena en la del Sureste), ignorando que la mayor parte de los peregrinos valencianos seguían la llamada Ruta de la Lana, que a través de Soria se une al Camino Francés en Burgos.

Además, con una simple ojeada a un mapa, se nota que el Camino de Levante, en su actual trazado, efectúa una serie de giros que añaden kilómetros y kilómetros a los peregrinos, que en el caso del Sureste se evitan, por ser un trazado más lineal.
Los principios y finales de etapa toledanos de esa ruta están localizados en El Toboso, Villa de Don Fadrique, Tembleque, Mora, Toledo, Torrijos y Escalona, y el resto de municipios integrados en la ruta son Quintanar de la Orden, Puebla de Almoradiel, Villacañas, Mascaraque, Almonacid de Toledo, Nambroca, Burguillos de Toledo, Cobisa, Villamiel de Toledo, Rielves, Barcience, Val de Santo Domingo, Maqueda y Almorox.
Por si fuera poco, muchos tramos de esa ruta han sido trazados por carreteras, lo que aumenta el peligro de tránsito de un trazado ya de por sí muy duro, por las largas etapas carentes de lugares de acogida y de otros servicios comunes en los Caminos de Santiago más conocidos.
Manuel Aliaga es un estudioso de los Caminos de Santiago. Desde Novelda y en colaboración con otro experto peregrino, Paco Serra, ha elaborado una cuidada guía del llamado Camino del Sureste o alicantino, que se distribuye gratuitamente a cuantos lo demandan.
Aliaga se ha dirigido a los alcaldes de los pueblos por lo que pasa esa ruta, asentada en el Camino Real marcado desde la Edad Media de Alicante a Santiago, para recordarles que “el Camino de Santiago, también pasa por su localidad” y sugerir, a la vista de la noticia mencionada, que “aprovechen la feliz iniciativa de la Excelentísima Diputación Provincial de Toledo de marcar el Camino de Santiago en la provincia de Toledo”.
En su carta, Aliaga, un mito en el mundo de las peregrinaciones jacobeas, dice que “aparte del Camino que quieren marcar, existen otros que contaron con a misma importancia o más, como es el caso del Camino del Sureste, que pasa por las localidades no citadas en la noticia: Villanueva de Bogas, Villamiel de Toledo, Huecas, Novés, Quismondo y Paredes de Escalona”, así como el denominado Camino Manchego, que enlaza con el del Sureste desde Ciudad Real y pasa por las localidades toledanas de Urda, Los Yébenes, Orgaz, Sonseca y Ajofrín.
Indica igualmente aliaga que “ambos caminos están marcados. El Camino del Sureste cuenta con guía y la del Manchego esta casi concluida y es posible que en breve sea editada por la Excelentísima Diputación Provincial de Ciudad Real”.
Por ello, el vicepresidente de la AACS del Sureste opina que “sería un buen momento para solicitar que estos tramos sean incluidos en el marcaje del Camino de Santiago en la provincia de Toledo y se incluyan en las posibles publicaciones”.
Además, recuerda que 2010, es Año Santo Jacobeo y “numerosos peregrinos buscan alternativas al Camino Francés”, y por ello, dice, “creemos que ustedes no deben de dejar pasar esta oportunidad”.
Este mismo mes se ha constituido en Escalona una Asociación de Amigos del Camino de Santiago de Toledo, que en las próximas semanas será legalizada ante los organismos competentes y que pretende cubrir el vacío que existe en ese sentido en el mapa de este tipo de organizaciones de defensa de las rutas jacobeas y apoyo a los peregrinos. Entre los miembros de la Asociación se cuentan algunos ediles del Ayuntamiento de Escalona.
Para finales de noviembre está convocada en Gotarrendura (Ávila) una reunión de Asociaciones de Amigos del Camino del Sureste, que aparentemente ya tiene un nuevo tema de discusión: la marginación de su ruta por la Diputación de Toledo.