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La Vía de Bayona gana atractivos y atrae a un millar de peregrinos al año

La Vía de Bayona continúa afianzándose atrayendo cada año a un mayor número de peregrinos. Desde que la Asociación de Amigos del Camino se propuso potenciarla y mejorar su señalización y servicios muchas cosas han cambiado en este tramo de la ruta jacobea que une el País Vasco con el Camino Francés, y que en la provincia de Burgos arranca en La Puebla de Arganzón y desemboca en la capital burgalesa.
El número de peregrinos aumenta de año en año, y en 2012 contabilizaron a 980 personas. Muchos de ellos pernoctaron en el albergue juvenil Fernán González y otros lo hicieron en hostales, pensiones u hoteles. El perfil está cambiando, y aunque la mayoría siguen siendo extranjeros, los españoles cada vez conocen más la ruta y apuestan por recorrerla.
No beneficia a la Asociación el cierre del albergue, por ajustes económicos, durante tres quincenas, lugar de referencia para los peregrinos y, donde además de camas reservadas para ellos, se localiza la sede de la asociación. Ya ha habido varias quejas de personas que fueron allí y se encontraron las puertas cerradas, lo que perjudica la imagen de Miranda, que «ahora mismo es el punto negro de la Vía de Bayona», sentencia su presidente, Andrés Terrazas.
En otras localidades de tamaño inferior, como La Puebla de Arganzón, Pancorbo, Briviesca o Quintanavides hay albergues, y Miranda, subrayan, debería tener uno municipal. Terrazas lleva «8 años» comunicando sus pretensiones al Ayuntamiento sin conseguir que se dé un paso en firme.
Mientras buscan una solución,  diseñan la programación para este 2013. Hace unas semanas el grupo celebró su asamblea general y  Terrazas fue de nuevo nombrado presidente. Su intención era dejar el cargo para centrar sus esfuerzos en la edición de una guía del Camino desde Las Landas hasta Santiago de Compostela. Como no se presentaron candidatos, accedió a seguir pero con la condición de que parte del trabajo recayera en los vocales, que aumentaron a diez. «Así por lo menos nos hemos quitado una cosa importante del trabajo, aunque sigo pensando que hay que renovar la figura del presidente para que entren también nuevas ideas», mantiene.

La guía podrá estar en la calle en un plazo de dos años, porque necesitan tiempo para recorrer toda la ruta, «preguntar a los peregrinos cómo se han comportado con ellos en los albergues, cómo es el trato, qué servicios hay, etcétera». En próximas fechas, tres miembros de la asociación de Las Landas se acercarán a Miranda a preparar una serie de etapas que quieren cubrir una treintena de miembros de su grupo en el mes de septiembre. Por lo demás, las nuevas comisiones ya se han puesto a trabajar. Por equipos, se encargan de cuestiones como la organización de etapas y excursiones, conferencias, señalización de la Vía de Bayona o seguimiento de los albergues.
También están preocupados por la pretensión del Gobierno vasco de retirar la señalización explicativa de la Vía de Bayona ubicada en Armiñón. La ruta ha sido declarada Bien de Interés Cultural (BIC) como camino de interior, y eso choca con la denominación de Camino de Santiago. «El alcalde que gobernaba cuando se puso la señal y la presidenta de la Junta Administrativa están moviéndose para que la dejen porque dicen que los primeros que nos hemos molestado por este camino hemos sido los de la asociación de Miranda», subraya el presidente. De hecho, en la última reunión que mantuvieron con el Gobierno vasco, éstos recalcaron su postura.